Capítulo 23

Estaba pensando en lo de Roniv y comencé a escuchar su material musical. Sonaba bastante bien y hacer arreglos de piano ahí no iba a ser un asunto tan difícil. Podría hacerlo en el momento sin necesidad de ensayar, puesto que eran círculos básicos de acordes. Por suerte había fanfarroneado bien. Además de aquel balance logístico que calculé, la voz de Roniv me pareció preciosa.

Intenté soñar un poco y decidí imaginarme su rostro. Cuando estaba en lo mejor de eso apareció Mika, frenéticamente. 

— ¡Ayúdame, Mak!

Mientras bajaba las escaleras para ayudarle al taxista a sacar un montón de paquetes tanto del porta maletas como del asiento trasero, pensaba en eso de que ya no la podía considerar como mí mujer.

Tarde o temprano iba a seguir enterándome de cosas y había considerado realmente la decisión de romper con ella

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo