Capítulo XXV
La reconstrucción de los reinos. Parte IV
- Observen, esos aldeanos son sus esclavos, debemos de hacer algo. - adquirió la Reina quien iba a actuar inmediatamente. Pero fue tomada de la mano por el general Norton.
- Su majestad, debemos de tener cuidado, los orcos son muy fuertes, primero vamos a analizar la situación allá, sabemos que son muy tontos, pero de igual manera su fuerza bruta no es un buen augurio, y tampoco sabemos el número de personas que se encuentran allí, podemos tratar de ayudarlos y en su lugar terminan matando a muchas más personas, hagamos esto bien su majestad. - Le dijo el general Norton mientras la miraba a los ojos, siempre había estado enamorado de esa mujer, de la misma mujer.
- Sí, tienes razón, envía rápidamente a algunos hombres de que averigüen de la situación allá dentro. - ordenó la Reina desde la lejanía mientras iba caminando en dirección a donde estaban sentado varios druidas.
- Quiero que se dirija