Capítulo treinta y tres.
Se metió al baño para darse una ducha relajante. Después de un rato salio. Se puso una ropa cómoda para dormir, seco su cabello y salio, para ir a ver si Sofía, por si necesitaba algo.
Anna toco la puerta y Sofía la dejo pasar.
— Hola Anna ¿hace cuanto llegaste?.
— Hace un rato ¿Cómo se siente? ¿Ya tomo su medicamento?.
— Ya no te preocupes. Cuanta me que tal tu día hoy.
— Bien, salí a platicar con mi amiga, se nos fue muy rápido el tiempo. ¿Ya ceno? ¿Le traigo algo?
— En realidad no tengo hambre Anna, ven siéntate a mi lado. — dijo Sofía y Anna tomó asiento.
— Dígame ¿Qué pasa? — preguntó Anna, al ver la cara seria de su suegra.
— Anna, se que el matrimonio entre ustedes dos fue muy apresurado, tambien se que los forzamos a esto. Pero yo quiero preguntarte algo. Y es que me he dado cuenta que Agustin a cambiado mucho, conozco a mi hijo y veo que esta enamorado de ti pero dime ¿Tú sientes algo por él? — preguntó Sofía.
— Yo aun no lo sé. Le soy sincera Agustin siempre pens