Kathleen sabía mejor que nadie que a Charlie no podía importarle menos cobrarle su servicio de Feng Shui, que por lo general oscilaba en los millones de dólares.

Después de todo, una sola Píldora Rejuvenecedora fácilmente podría costar diez mil millones de dólares estadounidenses o más. Existía una gran posibilidad de que Charlie fuera el verdadero dueño detrás de la Farmaceútica Boticaria.

La ganancia neta de la Farmaceútica Boticaria fácilmente podría oscilar entre miles de millones y diez mil millones de dólares estadounidenses al año. ¿Por qué a Charlie le importaría un simple millón de dólares?

Con eso en mente, Kathleen descubrió rápidamente las razones detrás de la acción de Charlie. Charlie estableció una imagen de Maestro de Feng Shui para su familia, pero no por dinero. Debía haber otras razones para ello. Quizás necesitaba tiempo y espacio para trabajar bajo su otra identidad.

Kathleen le dijo a Charlie en un tono comprensivo: “Gracias, Señor Wade. ¡Le debo un gran favor