La vida de Ethan y Emily había vuelto a la normalidad después de la intensa experiencia de desenmascarar a "El Sombra" y desmantelar la operación de espionaje. Con la empresa de Ethan a salvo, ambos se encontraban en un momento de tranquilidad y reflexión, listos para enfrentar nuevos desafíos y disfrutar de la rutina diaria.
El sol brillaba a través de las ventanas, llenando la casa de Ethan y Emily con una cálida luz matinal. La rutina de las mañanas era un momento que ambos apreciaban, una oportunidad para comenzar el día juntos y compartir un poco de paz antes de enfrentar sus respectivas responsabilidades.
Emily estaba en la cocina, preparando el desayuno. Le encantaba cocinar y siempre encontraba maneras de sorprender a Ethan con platos deliciosos y saludables. Esta mañana, estaba haciendo una tortilla de espinacas y champiñones, acompañada de jugo de naranja recién exprimido.
—Huele delicioso, Emily. No sé cómo lo haces, pero cada mañana logras superar la anterior —dijo Ethan,