209. TE LLEVO EN EL CORAZÓN
NARRADORA
Victoria había mencionado el nombre de su padre solo para fastidiar, pero cuando empezó a cantar, sus sentimientos de verdad afloraron.
Subida sobre la barra, su boca comenzó a entonar una de las canciones favoritas de Zarek.
Los recuerdos llegaron flotando a su mente mientras cerraba los ojos.
En el salón de su palacio, con la cálida chimenea chisporroteando, consumiendo la madera.
Era una niña y su padre le pedía que cantara esa melodía de amor incondicional, de separación y nostalgia.
La aprendió desde pequeña y siempre se la cantaba.
Sentía que Zarek se ponía algo triste, que los pensamientos lo llevaban a sucesos pasados.
Las notas se movían hermosamente por el aire, entrelazadas con todas las memorias de Victoria.
Las luces de las velas en la cantina titilaron, bajando de intensidad y sumiéndolos en un ambiente a media luz.
La magia vampírica hechizaba el corazón de todos, la melancolía de Victoria les llegaba al alma.
El Lord de los lobos fue el más afectado.
El puño