Luz abre los ojos, una sonrisa se dibuja y por primera vez en casi una semana pudo dormir tranquila. No sabe si por la leche o por las palabras tan lindas que le dijo Gerard.
Luego de eso, cada uno se terminó su taza en silencio y subieron a sus habitaciones, con solo una mirada se dijeron buenas noches y desearon un lindo sueño. (Solo las parejas más conectadas han conseguido comunicarse solo con la mirada y suele llevarles mucho tiempo)
Unas habitaciones más allá, Gerard se despierta contento, lleno de energía y con las ganas de sonreír todo el día.
-Este no parece un lunes normal – se mete al baño y se ve al espejo -. ¡Es que con ella ya nada es normal!
Por supuesto que se mete dando saltitos de adolescente, cantando y silbando, pensando que ha encontrado un punto en común con Luz, que podrá ayudarla a estudiar.
-Seré su tutor – dice saliendo de