-¡Esto no puede seguir así! – grita Matías -. Estoy harto que me sigas viendo la cara, solo por hacerte la interesante.
-No me hago la interesante – le dice Alfa -. Desde el inicio te dejé claro que no llegaría a ninguna parte contigo.
-Entonces lo nuestro fue solo un juego, un pasatiempo… - la puerta del departamento se abre y los ojos de Dan van desde Alfa en ropa interior a Matías solo con pantalones -.
-¿Qué está pasando aquí? – dice él en tono bajo -.
-No es lo que crees – le dice ella, recogiendo su ropa del suelo -. Matías solo… llegó para que le diera explicaciones y no sabe tocar a la puerta.
-Y parece que aprovechó de quitarse la ropa… y la tuya.
-Dan, no empieces tú también, no tengo por qué darte explicaciones… ¡A ninguno!
-No te preocupes, dejaré de buscarte, me ha quedado claro que yo no soy en único y a mí no me gusta compartir – mira a Matías y lanza un bufido -. Puedes seguir teniendo nada con el policía, yo me largo.
-Perfecto – dice ella pasándose la camiseta