El cuerpo de Sophie parpadeó y seguidamente desapareció.

Ella se teletransportó de regreso a la Residencia Celestial.

Después de regresar a la Residencia Celestial, su rostro estaba pálido y parecía haber sufrido una lesión grave. Ella dijo: “James, el mundo exterior se me oponen. Las inscripciones en la Estela del Infinito me atacarán, así que no puedo quedarme más”.

La voz de Sophie vino desde el interior de la Residencia Celestial.

Jame estaba desconcertado por sus palabras y preguntó: “¿Por qué estoy bien?”.

“Es porque tu base de cultivo es relativamente débil. Estás lejos del punto de llegar a entender las escrituras antiguas. Por lo tanto, no te atacarán”.

James volvió a preguntar: “Entonces, ¿qué debo hacer ahora?”.

Sophie dijo: “No hay prisa. Una potencia debe haber dejado este lugar atrás. Los fragmentos de su alma deben haberse quedado en este lugar”.

Después de que Sophie terminara de hablar, una luz blanca se reunió y formó una silueta.

James pudo ver vagamente que