Entonces, Darryl giró la cabeza hacia Sheryl y dijo: "Sheryl, deberías ir a ayudarlos".

Darryl vio que las distintas sectas principales habían perdido a mucha gente por heridas graves. A ese ritmo, el Señor Kenny acabaría con ellos en menos de media hora.

"¡Señor de los Dragones!".

Sheryl se quedó atónita. Se mordió los labios y dijo de forma vacilante: "¿Por qué quiere ayudar a esa gente que quisieron matarlo? Además, el Clan del Dragón Divino tiene que acatar la norma que nos impide participar en luchas internas dentro de los Nueve Continentes. Estamos aquí para protegerlo. La vida o la muerte de los demás no tiene nada que ver con nosotros", dijo Sheryl con indiferencia.

Era cierto que el Clan del Dragón Divino había habitado la Isla Legendaria de los Dragones durante miles de años. Nunca se habían involucrado en ninguno de los asuntos de los Nueve Continentes, y nunca serían parte de las guerras dentro de los continentes.

Los codiciosos humanos habían intentado capturar a