Megan tomó una respiración profunda y contempló. Sería difícil lidiar con Lily si Zhurong y el Agricultor Divino estaban a su lado.
Megan se mordió el labio y le instruyó a Fanny: “Fanny, ve y prepara un regalo antes de dirigirte a la Ciudad de Yunzhou. Invita a Lily, al Agricultor Divino y a Zhurong al Monte Emei. Recuerda, tu actitud debe ser sincera. Tienes que traerlos aquí pase lo que pase, ¿entendido?”.
Megan había decidido traer a Lily, al Agricultor Divino y a Zhurong al Monte Emei primero. Tendría más oportunidades de lidiar con ellos una vez que estuvieran en su territorio.
“¡Entendido!”. Fanny asintió y sonrió.
“Maestra Hermana Mayor, no se preocupe. Sé lo que tengo que hacer. Haré que Lily y los demás vengan. No la defraudaré”.
…
Mientras tanto, en la frontera de Westrington. Debajo de la montaña y del acantilado...
“Ah...”.
Donoghue se había caído del acantilado y sintió que la velocidad a la que estaba cayendo aumentaba cada vez más al escuchar el viento en sus