Mundo ficciónIniciar sesiónPARTE 2: EL HALCÓN DE LA NOCHE
El primer rayo de sol se filtraba por las celosías de ébano del palacio, pintando franjas doradas sobre las sábanas de lino fino. Nefertari se despertó en los brazos de Ahmose, su cuerpo acurrucado contra el suyo. Era el único lugar en el mundo donde se sentía completamente a salvo, completamente ella misma.
—Buenos días, mi amor —susurró Ahmose, su voz adormilada. Sus brazos la apretaron un poco más, como si quisiera retener el tiempo.
Nefertari sonrió, sin abrir los ojos. —Buenos días, mi guerrero.
El aroma a jazmín del jardín se colaba por la ventana abierta, mezclándose con el olor a incienso que ya se elevaba desde algún rincón del palacio. Los primeros sonidos de la corte comenzaron a despertarse: el murmullo distante de los sirvientes, el suave chapoteo del agua en las fuentes del patio interior. Era un recordatorio sutil, pero persisten







