Capítulo 71 —Sin restricciones
Narrador:
El apartamento de Xavier parecía flotar en un aire de felicidad que ni él ni Mickaela habían experimentado en mucho tiempo. La luz matutina atravesaba los ventanales, bañando la sala en tonos cálidos mientras Mickaela se sentaba en el sofá, con una taza de café en las manos y una sonrisa serena que Xavier no podía dejar de admirar.
—¿Qué? —preguntó ella al notar su mirada fija, con una mezcla de diversión y curiosidad.
—Nada —respondió él, acercándose para dejar un beso en su frente —Solo me pregunto cómo es posible que cada día te veas más hermosa.
Mickaela rió suavemente, sacudiendo la cabeza.