Un día después.
En la mansión de los Parker.
— ¡Rouse! — Exclamó Annie abrazando a su amiga. — Me alegra tanto que hayas regresado, tu madre ha estado muy preocupada por ti.
Rouse quien había llegado en compañía de Alice y Harold, ingresó al salón de invitados especiales, esa tarde para tomar el té con sus amigos.
— ¿Dónde está Patrick? — Preguntó Rouse preocupada.
Annie hizo una expresión cabizbaja.
— Tiene mucho trabajo que hacer después de… Bueno…
— ¿Después de qué? — Preguntó Rouse sin tener idea de lo que Thomas y Leandro habían hecho en su ausencia.
Annie exhaló y comenzó a contarle todo lo sucedido a Rouse, con la clínica, los clientes de ellos y hasta los proveedores.
— ¡¿Cómo Leandro pudo hacerles eso?! ¡Hablaré con él! Ya verás Annie haré que—
— ¡No Rouse! — Exclamó Annie interrumpiendo a Rouse. — Ya el señor Thomas Davis se ocupó de todo y Leandro también… Solo que… Desde eso mi matrimonio con Patrick ha estado un poco tenso. — Contestó Annie cabizbaja. — Estábamos