—¿Eres mi papá? Pero también eres el papá de Alexei... —Alaric no sabía cómo explicar aquello, cómo podría decirle a su pequeña hija que él le había causado mucho daño a su madre, que no merecía ser llamado padre por ella.
Que, de hecho, la mayor razón por la que había puesto una línea entre los dos