CAPITULO 68 MI META.
Sebastián Ghill.
─ Me siento cansada ─ musitó Aleska y eso dió por finalizada la charla, pero estaba seguro que esta conversación debía continuar, bien sea en una consulta con mi padre, o en la privacidad de los dos.
─ Vamos para que te acuestes un rato ─ mencioné caminando hacia ella.
─ Yo, puedo sola ─ susurró levantándose con cuidado.
─ Yo, pasaré saludando a Frenna, la invitaré a cenar ─ mencionó mi padre, tratando de calmar el ambiente.
─ ¿A cenar? ─ Preguntó Aleska y sus labios mostraron una suave sonrisa, mi padre también sonrió, al darse cuenta que consiguió su cometido, despidiéndose de mi novia. Aleska, caminó lo que le faltaba a la vista de los dos que nos quedamos observándola.
Mi padre, salió de la habitación de Aleska, cuando ella sola se acomodó en su cama.
Caminé hasta su lado y levanté su mentón buscando sus labios, los besé ligeramente, sabía que lo del cansancio solo había sido una excusa, para no continuar hablando del tema del pasado, que aún hoy, nos tort