Rodrigo
Lizzie se siente suave entre mis brazos. Desde el primer día en que nos conocimos, hemos sido dos seres elementalmente sexuales, posesivos y caprichosos. La atracción entre los dos es innegable, y evolucionar hacia una relación donde esa atracción no sea lo único que nos une, no ha sido ni será fácil, en especial con tantos secretos de por medio.