Rahmi
Estaba bailando con Rebeca cuando comencé a besar ese escote, luego besé su boca apasionadamente hasta dejarnos sin aliento. Estábamos en la sala de estar y había un gran mostrador allí, así que puse a mi bombón sentado en el mostrador con las piernas abiertas y comencé a chuparla.
Me encanta chupar a esta mujer, es deliciosa!
"Vamos, bombón, disfrútalo por mí".
Con mis palabras de mando ella pronto vino por mí. Abrí más sus piernas y enterré mi polla en su coño. Mientras yo estaba en él, ella estaba acostada en el mostrador con los ojos cerrados y gimiendo y fue un espectáculo maravilloso para la vista.
- Mírame mi delicia, quiero verte disfrutarlo.
Ella me miró con esos ojos negros y no pude evitarlo, golpeé una vez más hasta que nos juntamos. Definitivamente no me canso de ver su orgasmo.
Levanté su cuerpo y le pedí que sostuviera el mostrador. De espaldas a mí, bajé su torso haciendo cabriolas de buda y empujé con fuerza en su ano, sin piedad. Ya no podía comerme esta delici