Cada hoja hacía añicos mi corazón ¿Qué tan ciego quiso hacerse el señor Conrado del cuidado de su hijo? Sabía de sobra que la esposa de el, odiaba a Agus y su hija no lo toleraba, de eso a que dejara pasar las maléficas acciones que leía en cada hoja, era un mar de separación. Agustin no solo lo habían tratado como al hijo de la empleada en sociedad, no se sintieron satisfechas con maltratarlo física y verbalmente, no, esa era la más simple de las diversiones de ellas "¡El apdre de Agus era una bestia!"
Mientras que los hijos con su amante estaban en academias de prestigio con maestros privados que los ayudan en casa, Agustín había sido matriculado en una escuela pública ¿No debió haber sido al revés? Rodeado de personas que la maltrataban debio haberse sentido miserable y aun asi conservo su sencilles y amabilidad
“Huérfano” eso decía su inscripción, su padre se había encargado personalmente de llenar el registro y de avisarles que no tenían que cuidar de el, solo necesitaba que est