—¿Qué pasa con Raquel, Bruno? —la voz de Clara estaba cargada de preocupación, sus ojos buscaban respuestas mientras se encontraban en la sala, conversando.
Bruno respiró profundo, vio hacia un lado, luego volvió a ver a Clara. Con cada segundo que pasaba, ella entendía que él estaba reconsiderando su relación.
Tuvieron su primera pelea hacía apenas una semana, gracias a la pequeña fiesta que ella organizó en la casa. En ese momento, Bruno estaba furioso y se aseguró de recordarle que ella no tenía derecho a invitar gente sin su permiso.
Solo después de su desacuerdo, Clara se dio cuenta de que había sobrepasado sus límites. Después de todo, Bruno aún no se había casado con ella.
—Hay un problema con la empresa, y no sé si puedo manejarlo sin Raquel —le explicó Bruno—. Nuestros clientes VIP no están comprando piezas de nuestra edición limitada más reciente. ¿Qué tal si...?
—Bruno, no estarás pensando en volver con Raquel, ¿verdad? —Clara se levantó y caminó hacia él, lo abrazó y comenz