— Entonces podría ahorrarme la siguiente pregunta…— Contestó ella una vez abierta la camisa de Gregory, cerró los ojos y se inclinó a acariciar su pecho con la nariz mientras se embriagaba de su aroma, tenía la sensación de que olía todavía mejor, dejo un beso en su pecho y levantó la vista para verlo.— ¿Cómo se sabe que se está enamorada?
— ¿Sabes lo cruel que estás siendo conmigo en este momento?— Aseguró su futuro prometido sonriendo, quitándole un mechón de cabello rubio, que impedía verla del todo el rostro — Me haces pensar en ese día en el yate.—Recordó cerrando los ojos, controlando su respiración al sentir como su cuerpo se calentaba a medida que sus labios recorrían su torso.— Esa pregunta no puedo responderla, aunque me gustaría saberlo a mí también.
Llevó su mano derecha hasta su rostro, tomando su mentón, alzándolo suavemente, rozándole los labios al hablar.
— Porque cómo dije, enamorarme de ti, para mí, sería lo más lindo que podría pasarme.
— ¿Qué habría pasado si no hu