—¿Y eso es malo? -preguntó curiosa.
—Para mi y eldisfrute de mis prácticas sexuales no lo es, pero, se deja ver comosadomasoquísmo y y cualquier tipo de perversión que tenga que ver con el BDSM yparafilias de cualquier tipo - pestañeó tan rápido que mis ojos no pudieronregistrar el número de veces que lo hizo.