Al ver que a su prometida no le gustó la idea, Saulo se apresuró a explicarse.
— Arya es una amiga de la infancia. ¿Nunca te hablé de ella? — preguntó, fingiendo estar tranquilo.
— ¡No, nunca lo hiciste! — respondió seria.
— No te preocupes, morena. Ella es solo una amiga — sonrió nervioso, conocía