Capitulo 14. Una información poco agradable
Oh Diosa! Acabo de llegar a casa y estoy no sé cómo estoy... me duele hasta el último de los vellos de mi cuerpo.
Paso a la cocina y lo encuentro allí comiendo algo, el muy hijo de... está duchado y comiendo pollo frito.
Voy al frigorífico cojo un refresco de cola, lo abro y doy un largo trago, dejo el refresco sobre la isla, cojo un plato y me sirvo pollo. Como en silencio y con ansias.
— No comas tan deprisa, te vas a atragantar—
Levanto mi cabeza del plato y lo miro con desdén. Ahora se preocupa de mi, que se coma una mierda, cuando lo llame por el link me ignoro y después pudo haber venido a buscarme en el Jeep, pero no aquí el mismísimo Alfa no quiso y tuve que volver en bicicleta.
Termino de comer, recojo mis cosas y subo a darme una ducha. Paso lo más lejos de él. No quiero que me toque en estos momentos, subo al dormitorio y abro la ducha. Paso tanto tiempo dentro que mis dedos comienzan a arrugarse.
Me pongo el pijama y voy a la cama, me paro de golpe y recuerdo que estoy mo