Triana ni siquiera se molestó en prestar atención al estado de ánimo de Sonia. En ese momento, solo quería explicárselo a Hugo y evitar así, ser arrastrada por la difícil situación.
—Señor Hugo, lo has visto todo. ¡Realmente no te mentí! ¡No tenía idea de que ese inútil fuera tan fuerte!
Triana se e