El golpe de la puerta envió a Colton corriendo. Pasando sobre el vidrio roto y la pierna de la silla rota, abrió la puerta; rezándole a lo que fuera que él creyera, que Kate estuviera del otro lado.
Pero él sabía. A pesar de toda su amabilidad y compasión, ella era obstinada como la mierda. Igual que él.
Una fuerte punzada atravesó su pie y, mientras miraba a su invitado, soltó un agresivo: "Mierda".
"Encantado de verte a ti, también, Colton". Paloma frunció el ceño, con los ojos sobre su hombro, viendo el desorden que había creado. "Maldita sea, ¿qué pasó?".
Señalándole que entrara, Colton se sentó en el sofá y analizó el daño que el fragmento de vidrio había hecho a la suela de su pie. "Kate no está, si es a ella a la que buscas".
"Ella no está respondiendo a la puerta o su teléfono. ¿Sabes dónde está?".
Estrechando su mirada a Colton, sus cejas fruncidas mientras sus gruesos dedos y uñas trataban de sacar el vidrio. Se encogió de hombros con indiferencia. "Ella no ha sal