La expresión de calma en su rostro me llamó la atención, parecía completamente ajeno al desastre que atravesamos hace unas horas.
-Entiendo que los jóvenes Askin te han estado intimidando, vengo en nombre de nuestro Rey Alfa y nuestra Señora Luna a extender una disculpa. Son aún muy inmaduros para su edad. -
“Mierda, Zhara le había contado”.
-¡Oh, no!, nada de eso. Estamos bien, ha sido un mal entendido. -
La expresión no le cambió ni un poco, era imposible leer si me creía o no. Pero cuando su vista pasó al regalo en la mesa, entonces tuvo una expresión.
-¿Un admirador?. -
Volte a ver el regalo y luego regresé la vista a él, sentí los colores subirme al rostro; por que pensaba que tendría yo un admirador.
-¡Nada de eso!, ha sido Zhara. - me rasque la nuca algo incomoda.
-Entiendo, bueno. Disfruten su estancia. - Inclinó la cabeza ligeramente y se dirigió hacia Tristan. - Tienes un momento Tristan, necesito hablar contigo en privado. -
Ambos subieron las escaleras hasta la sala extern