Pasamos los siguientes 2 días y noches con la misma rutina; levantarme, fingía que trabajaba al lado de Donovan y por la tarde entrenaba.
Nazir pasaba su tiempo de entrenamiento alejado por completo de los demás machos de la manada y sufría el resto del día escondido o en silencio en una enorme caja de metal del tamaño de un remolque.
“¿Qué crees que haya adentro?”, me preguntó RoseOnyx.
“¿Aparte de alguno de los tontos?”.
“Si, aparte de ellos”, la podía sentir caminando en círculos, confundida e intrigada por la caja.
Yo solo m