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EL POV DE LUCAS.

Llegamos al centro a altas horas de la noche y prefiero llamarlo fortaleza, en lugar de edificio ordinario. Se elevó hacia el cielo con materiales de construcción que naturalmente se usarían para una prisión. La única diferencia fueron los colores claros utilizados para la pintura.

Me acogieron y parecía un hospital, con gente deambulando con batas blancas.

Tomamos el ascensor y aterrizamos en un piso que era bastante divertido. Las celdas allí estaban disfrazadas de habitaciones.

Se abrió una puerta y me empujaron hacia una de ellas. La gran pared estaba pintada de rosa, con corazones blancos esparcidos a su alrededor.

A mi derecha había rejas pintadas de color crema y en la habitación de al lado estaba mi compañero de cuarto. Era una mujer con el pelo rojo cayendo sobre sus hombros y un gran tatuaje de una serpiente sobre su brazo.

A mi izquierda había un hombre que parecía completamente normal e inofensivo. En mi habitación había una gran cama blanca, un televi