-Se encuentra bien mi señora? -
Aún estoy acostada sobre Panzer, encogida de mis extremidades, revisándome si siento algún dolor, solo estoy un poco aturdida.
-Estoy bien-
-Señorita Zoe, ¿está bien? -
-…Si…- Zoe suspira, como si estuviera muy cansada.
No sé dónde estamos, pero esta tan oscuro que no veo ni a Zoe ni a Panzer, y estoy pegada a ellos.
Me levanto, pero siempre tocando una parte de la armadura de Panzer, no quiero perderlo en esta oscuridad tan intensa, también siento que Zoe toca mi mano.
-¿Dónde estamos? -
-No lo sé- Contesta Zoe. – Pero no nos moveremos de aquí, logre pedir ayuda con mi magia- Eso me reconforta un poco.
-Es bueno escuchar eso- Porque no se escucha nada, solo nuestras voces, su eco y el movimiento de la armadura de Panzer. -¿A quién le pediste ayuda? - Volteo hacia un lado - ¿Qué es eso? – Señalo con el dedo, que ni yo logro ver por la oscuridad, una luz pequeña se ve muy a lo lejos, pero puedo apreciar que se viene acercando a gran velocidad.
-