XXI

Natasha.

Hay personas a las que no les importa si les quitaron todo, hacen lo hasta lo imposible por recuperar aquello o buscan algo mucho mejor aún.

Hoy no tengo nada, sin embargo, mis ganas de arrazar con todo son inmensas.

Me llevo mi cartera al hombro y comienzo a caminar por el pasillo para bajar las escaleras. Hace un rato fui a la Santa Rosalía, los médicos no han encontrado mejoras en su paciente. Sigue estando en su estado vegetal.

—Oh, vais de salida— Amelia sale del ascensor cuando bajo el último peldaño.

—Sí— le beso la frente y me encamino al ascensor—. Sabeis que culmino lo que comienzo, pero, ¿hay algo que quereis decirme?

—Oh, no, nada— hace un ademán de manos—. Solo quería haceros compañía.

—Vale— salimos del ascensor, encaminándonos al estacionamiento—. Te hablo cuando llegue de Colombia.

—Vale— me abraz

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo