Capítulo 429: El zorro y la sabueso
DONNA CRUZ

—¿A dónde vas? —preguntó Eliot cuando corrí detrás de Piero, haciendo que me detuviera a mitad de calle.

—¿Cómo qué a dónde? —No entendía. ¿No se suponía que estábamos huyendo?

—Súbete al auto —sentenció con el ceño fruncido mientras Cristine permanecía sentada en el asiento trasero, negando con la cabeza y conteniendo su sonrisa.

—Pero… pero… —Empecé a dar brinquitos, cambiando de pie mientras veía a Piero esperándome junto a su potente e intimidante motocicleta.

—No lo voy a repetir, jovencita —me reprendió Eliot provocando que hiciera un puchero—. Ni creas que te dejaré ir con él. Además, las motos son peligrosas, ahora conducidas por un mafioso, doble peligro.

—Me gusta el peligro —chillé con los hombros caídos aumentando la intensidad de mi puchero.

—¡Señorita, ya dije! —exclamó Eliot tentado a venir por mí, hasta que Cristine asomó su mano, posándola sobre la de él para detenerlo.

—Déjala… sabe lo que hace —intervino, convirtiéndose en una luz en mi camino.
Sathara

Bueno, mis niñas, hoy se acaba esta historia, ¿están listas? ¡Yo no! jajaja Ya me duele el corazón de pensar que me despediré de los Magnani, los Bennet y Bernardi.

| 99+
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App