❁ CAMÍL
-¡Sácala de ahí hijo de puta, si es a mi quié quieres matar ¿por qué está ella adentro y no yo!.—Los gritos de mi madre me van despertando y la risa de Clark me acelera el corazón inmediatamente poniéndome alerta, abro los ojos y estoy a oscuras, me falta el aire y estoy entrando en pánico—
-¡Cálmate mujer, solo quiero comprobar algo que escuché por ahí!.
-¡Maldito desgraciado!, ¡¿quieres comprobar si es cierto que sufre ataques de pánico?!, ¡Pues si, ahora sácala de ahí imbécil!.—Vuelve a reír con los gritos de mi madre, siento como se acerca, intento respirar muy lentamente, el pánico corroe mi cuerpo. Abre el ataúd y me sonríe—
-Hola hermosa Mrkev. Ven, toma mi mano.—Miro su mano, el odio me golpea como un balde de agua fría, me sostengo a cada lado del ataúd para levantarme con la mirada fija en él, me sonríe con picardía.
La escena frente a mi me deja estática unos segundos. Mi madre amarrada a una silla, a su derecha un enorme hoyo dónde cabe perfectamente bien el ataúd