Al día siguiente...
Estoy con muchos nervios. Hoy por la tarde después de salir de mis clases en la universidad, tendré el "honor" de conocer a quién se supone será mi futuro esposo.
Anoche no pude dormir bien pensando en la reacción que tendrán ellos al descubrir que yo ya no estoy soltera.
Bajo a la cocina y mi tía está ahí cocinando unos deliciosos huevos revueltos acompañados con unos perfectos panecillos tostados y un aromático café.
- Mmm, Pero qué rico huele por aquí tía. Digo dándole un beso de buenos días en la mejilla.
- Y todo por complacerte a ti hija. Sé que esto te encanta y por eso amo hacerlo.
- ¿Tía por qué me complace tanto? Sí yo ni siquiera la venía a visitar seguido, bueno por no decir que nunca había venido a visitarla, hasta hoy que estoy estudiando en este lugar.
- Mira, tu tío y yo siempre quisimos tener una hija, pero Dios no lo permitió y solo nos regaló a tu primo.
Luego tuve que operarme porqu