Regresar a La Mansión, me tensa, simplemente porque tendré que verla y no voy a mentir ansiaba hacerlo, Nisha se ha convertido en el rayo de luz que ilumina mi oscura existencia y aunque tome la decisión correcta se cuánto va a costarme llevarlo a cabo, mas sabiendo que es capaz de soportar que la toque, que la bese.
Subo las escaleras hacia mi habitación y con la primera que tropiezo es Max, que al verme sonríe ampliamente
– ¿finalmente te dignas a aparecer? – Pregunta tendiendo sus brazos en mi dirección y rodeándome con ellos en un cálido abrazo de bienvenida – ¿todo bien? – pregunta preocupada
– Excelente – respondo dejando un beso sobre su coronilla, me libero y continuo andado.
– ¿estabas en el Yate verdad? – pregunta curiosa, rio
– si ¿Por qué?
– debiste haberme lle