Recordando el pasado

-¡Hola, Greyson! ¡Pensé que no ibas a venir! – Dijo Novalee entregándole una bebida –

-¿Por qué pensaste una cosa así? Yo siempre vengo al baile – Dijo Greyson mirándola desde el vestido ajustándose a sus curvas para luego mirar su cabello y sus labios – Estás muy bonita –  Dijo Greyson y Novalee no tuvo oportunidad de responder porque apareció Candi –

-¡Grey! ¿Qué haces aquí? – Dijo Candi tomándolo por el brazo – Vamos a saludar a los amigos y el baile ya va a comenzar – Con lo que Candi terminó llevándoselo –

Pronto, ya había llegado mucha gente y los chicos del grupo musical obsequiaban con todo tipo de canciones. Novalee estaba observando desde su puesto de bebidas que ya habían muchas parejas bailando en la pista. El ambiente era alegre sin dudar.

-¿Bailamos Novalee? – Preguntó Greg y Novalee miró a Daisy –

-¡Anda! ¡Ve a bailar, Novalee! Yo cuido el puesto – Dijo Daisy –

Greg llevó a Novalee a la pista y comenzaron a bailar. Por el rabillo del ojo vio a Grayson observándolos con cara de pocos amigos y Novalee no entendía por qué, pues él había llegado con la odiosa de la Candi. Terminó la canción y comenzó a sonar una muy alegre y folclórica que a todos les encantaba bailar tanto adultos como jóvenes. Al principio se bailaba en parejas, pero luego hacían un corredor por donde pasaba cada pareja mostrando sus mejores pasos del baile. 

Novalee vio a Grayson pararse frente a Candi y comenzaron a hacer sus mejores pasos. Cuando llegaron al medio del corredor entre las parejas Greyson con una rodilla en el piso se quitó su sombrero y observaba a su compañera dar vueltas. Greyson le  agitaba la falda con la mano donde tenía el sombrero. 

-¡Qué descarada! ¡Se le veía la ropa interior, por Dios! – Dijo Novalee molesta pero sin dejar de aplaudir –

Fue el turno de Novalee y Greg. Ella, hacía movimientos coquetos y elegantes con su falda y Greg abría los brazos dando vuelta alrededor de ella. Al llegar al centro del corredor hecho por las parejas él se arrodilló quitándose el sombrero y abriendo los brazos para que ella bailara batiendo su falda, luego Greg se puso de pie y siguieron bailando hasta el final del corredor. Al final, las parejas deshacían el corredor y volvían a bailar en parejas en toda la pista. 

Al terminar la música todos iban a tomar una bebida. Ben se acercó tímido a Novalee

-¿Bailas conmigo Novalee? –

 -¡Claro, Ben! ¡Vamos a bailar! – Dijo Novalee con una sonrisa –

Llegaron a la pista y comenzaron a bailar. La falta de práctica en el baile era obvia de parte de Ben, sin embargo Novalee siguió sonriendo al muchacho cuyas manos temblaban entre las suyas. 

Al terminar la canción, Ben la tomó nuevamente para bailar y en ese momento apareció Greg tomando la mano de Novalee.

-Lo siento, pequeñín, pero éste baile ya está apartado –

-¡Greg! ¡No puedes comportarte así! – Dijo Novalee pero Greg no le prestó atención y la abrazó para comenzar a bailar lo que molestó a Novalee. La situación sólo duró un momento, porque Greyson se acercó y se metió entre los dos empujando a Greg lejos de Novalee quien quedó a su espalda, pero viendo la situación se puso frente a Grayson para intentar hablarle, pero éste miraba con ojos de fuego a Greg.

-¿Qué te pasa, Greyson? – Gritó Greg –

-¡Deja a Novalee en paz! – Gritó Grayson también volviendo a empujar a Greg a pesar de que Novalee estaba frente a él –

-¿Quién lo dice? – Gritó Greg –

-¡Lo digo yo! – Dijo Greyson furioso y Greg lanzó el primer golpe. Alguien jaló a Novalee, para quitarla de en medio de ellos dos. Se escuchaban gritos de mujeres, mientras seguía la pelea. Ambos, se dieron muy buenos golpes hasta que Greyson logró tumbar a Greg y propinarle buenos golpes y fue allí que se metieron a separarlos, ya que Greg estaba a punto de perder la conciencia. Candi se acercó a Greyson y se marcharon. 

Novalee se acercó a ver cómo estaba Greg, pero entre dos de sus amigos decidieron llevarlo a casa, por lo que Novalee regresó a su puesto de bebidas a seguir atendiendo y no volvió a bailar en toda la noche. A las dos terminó su turno en el puesto de bebidas y se despidió de todos para irse a casa sola como siempre. 

Comenzó a caminar tranquila por las calles de su pueblo que conocía tan bien cuando escuchó un ruido detrás de ella y enseguida se agachó a tomar una piedra y voltearse a ver quién la seguía. Vio la figura de un hombre que caminaba hacia ella y con los ojos entrecerrados espero para ver con alivio que era Greyson. Cuando estuvo más cerca, vio que tenía una herida en su ceja izquierda.

-Pensé que te habías ido más temprano con Candi – Dijo Novalee botando la piedra – 

-Sólo la dejé en su casa – Dijo Greyson – Quería asegurarme que llegaras bien a tu casa. Ya que no tienes un novio que te acompañe –

-¿Y cómo sabes que no tengo novio? – Preguntó Novalee y Greyson se paró de pronto y la tomó por un brazo deteniéndola también –

- ¿Tienes novio? ¿Quién es? –

Novalee esbozó una sonrisa y sólo dijo:

-No tengo ningún novio, pero eso no es asunto tuyo – Dijo Novalee –

-¡Claro que sí lo es! ¡Yo le prometí a mi madre cuidarte! ¡Y no permitiré que ningún zagaletón quiera aprovecharse de ti – Dijo Greyson airado –

-¿Cómo Greg? – Preguntó Novalee –

-Sí. Exactamente como Greg – Dijo Greyson enfurruñado y comenzó a caminar rápido, por lo cual, Novalee tuvo que correr prácticamente para alcanzarlo –

-¿Y quién sería un buen novio para mí según tú? – Preguntó Novalee con una ceja levantada y Greyson la miró. Parecía que iba a decir algo, pero se arrepintió y volvió a mirar al frente – 

-No sé. Alguien fuerte, trabajador, servicial, atento –

-¿Cómo tú, por ejemplo? – Preguntó Novalee –

-Bueno, sí – Dijo Greyson deteniéndose frente a ella – ¿Qué tendría de malo? – 

-Absolutamente nada, pero como tú andas con Candi para todos lados – Dijo Novalee volviendo a caminar –

-Fuimos novios, pero ya terminamos. Es ella quien siempre me busca – Dijo Greyson levantándose de hombros – Yo ahora estoy enamorado de otra – Dijo mirando a Novalee de reojo mientras daban los últimos pasos para entrar al porche de la casa de Novalee – 

-¿Ah sí? ¿Y quién es? – Preguntó Novalee caminando por el sendero que llevaba al porche de su casa – Si se puede saber –

-Es la chica más linda que en mi vida he visto – Dijo Greyson – Muero por decírselo todos los días, pero no lo hago porque no sé si ella está enamorada de mí o me ve sólo como un amigo – Dijo Greyson parándose frente a Novalee mientras ésta abrió la puerta –

-¿Y por qué no hablas con ella? Tienes que ser valiente y preguntarle, porque ¿Qué tal que ella está enamorada de ti también y están perdiendo el tiempo como dos tontos? – Dijo Novalee entrando a la casa y salió rápido con una crema en las manos y gasa con adhesivo – Debes curarte esa herida – Dijo Novalee y se quedaron mirando a los ojos, pero cuando Greyson se estaba acercando para besarla, Novalee le puso en el pecho la crema, la gasa y el adhesivo que Greyson agarró antes de que se cayeran y entró corriendo a la casa y cerró la puerta de golpe recostándose de ésta, con el corazón acelerado, como si hubiera corrido una maratón. Por su parte, Greyson, suspiró con una gran sonrisa en los labios y se fue llevándose lo que Novalee le dio para curarse la ceja –

Ese era uno de los recuerdos más bonitos que tenía con Greyson – Se dijo Novalee suspirando y sentándose en la cama porque ya había terminado de acomodar la ropa de su pequeña maleta –

En ese momento, golpearon a su puerta y fue a abrir. Era un joven de la tripulación uniformado, que traía sus dos maletas grandes. Novalee sonrió ampliamente y le indicó que dejara las maletas allí y casi al mismo tiempo, llegó otro con un arreglo de rosas increíble. Se lo entregó y ella despidió a ambos, cerró la puerta y puso las flores en la mesita de la sala. Tomó la tarjeta que traía en sus manos y leyó:

Hoy, es el primer día del resto de tu vida. No te arrepentirás de la decisión que tomaste. (Sin firma)

Novalee se quedó pensando en lo bello del mensaje y en lo mucho que significaba para ella. ¿Será cierto que no se arrepentiría de la decisión que tomó? 

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