Lucas.
Domingo, 14 de Febrero de 2016.
Una lágrima cayó por mi mejilla y miré a Blower que abrió los ojos de par en par, horrorizado, al darse cuenta de que él no se había derrumbado según lo planeado. Mientras, Tyson se enderezaba y se giraba muy lentamente. Sus ojos, duros y fríos, fijos en Blower. «¡Esta es la razón por la que debían de haber planeado mejor las cosas!», gritó la voz en mi cabeza. Ahora nunca podríamos volver acercarnos a la salida, y Tyson se aseguraría de cerrar la puerta con llave en todo momento.
Me apretujé junto a la pared que estaba detrás de mi y me clavé las uñas en las palmas de las