Verifico que sean las cuatro de la tarde, a esta hora el departamento de radiología no está tan transcurrido como en la mañana. Dejo a Federica y Estefanía en la oficina y bajo, aún queda una hora de trabajo.
Saludo a las cajeras y paso directamente a la oficina de los médicos. Antes de entrar escucho unas voces y me freno.
—¿Dónde has estado estos días? &mdas