Capítulo 69. Amor y dolor, van de la mano
Kevin sonrió, estaba aliviado, suspiró y sus manos temblaban.
—Está viva, papá —declaró y aún aturdido se puso de pie— ¿Dónde diablos está ese hechicero de pacotilla?
Zack llevó a Kevin a las puertas del reino de Dragos, allí los esperaba Briana con Dragos.
A Kevin no le hizo gracia ver a Briana al lado de Dragos, de inmediato gruñó Baly dentro de él y fue hacia Briana abrazándola, apartándose del vampiro, aspiró en su cuello aliviado de que ella no olía a él.
—Estás bien —susurró en su oído— ¿cómo está Kila?
«Convaleciente, cielo, necesitada de amor y mimos» —contestó Kila coqueta y Kevin besó a Briana sin dejarla hablar.
«Mi hembra hermosa, no volverás a desaparecer de mí, tú eres la alegría de mi vida» —decía Baly extasiado.
—Zack —pronunció Briana y Kevin se separó de ella confuso.
—Yo no he hecho nada, no hagas que el lobo feroz me mate —inquirió Zack mirando a Briana.
—No sean estúpidos, me refiero a que necesitamos que Zack vaya con Agata.
Dragos