Baelmir movió los labios, pero al final no dijo nada. En realidad, estaba profundamente preocupado si Simón era capaz de superar esta prueba. Después de todo, la existencia de este círculo mágico combinado tenía solo dos propósitos. El primero era proporcionar agua subterránea a los habitantes de la ciudad desértica de Arenastra, y el segundo, simplemente, era poner a prueba a Simón.
Si Simón lograba superar la prueba, naturalmente conseguiría un fragmento de la vasija de dragón. Sin embargo, para Baelmir, el que Simón obtuviera el fragmento de la vasija de dragón no era lo más importante. Lo más crucial de todo esto era si los 200,000 habitantes de Arenastra seguirían teniendo acceso al agua subterránea.
Porque, si Simón no lograba pasar la prueba y destruía el círculo mágico, la corriente subterránea perdería por completo la fuerza guiadora del círculo mágico y, en consecuencia, cambiaría de curso. Los afluentes del río subterráneo de Arenastra también empezarían a secarse, y en ese