—Esto no es tu culpa, el Hijo de la Luz murió en este espacio-tiempo, pero el soberano de la oscuridad sobrevivió. Su poder sigue aumentando de forma gradual, tal vez esto sea el destino de este espacio-tiempo.
—Ahora tomaré una parte de tu energía, para que el bien y el mal dentro de ti se mantengan en completo equilibrio. A partir de este momento, espero que puedas practicar con dedicación. Cuando hayas eliminado tus pensamientos malignos, podrás regresar a buscarme y con tranquilidad puedas recuperar tu energía.
—Muchas gracias, señor Delfín.
La mujer líquida hizo una reverencia profunda en señal de agradecimiento a Delfín, luego se transformó en un líquido negro que se hundió poco a poco en el suelo, desapareciendo. En ese instante, una luz dorada destelló y Delfín también desapareció. Ocho vasijas del dragón cayeron del aire y aterrizaron justo junto a Simón.
En su sueño, Simón se dio cuenta de que estaba de pie sobre las nubes. Un dragón blanco se retorcía entre las capas de nube