“¿Oh?”. Frank levantó las cejas, esperando que ella continuara.

“Estoy segura de que sabe que una ligera diferencia en el uso de los ingredientes puede producir resultados diferentes. Lily cambió la fórmula original, e incluso le pidió a su asistente que hiciera otros cambios en secreto. Además, no me he estado sintiendo bien y he tenido sinusitis, así que se aprovecharon de ello. No tuvimos más remedio que molestarlo y pedir su ayuda, Señor Moreau”, explicó Melanie, con la mirada baja todo el tiempo, y luciendo como si estuviera a punto de llorar.

Lucía deprimida, y esa expresión suya hacía que la gente se apiadara de ella. Frank la observó mientras sus dedos golpeaban suavemente la mesa. No sabían qué pasaba por su cabeza ni hasta qué punto creía en las palabras de Melanie.

Nathaniel volvió en sí y apoyó a Melanie: “Ella tiene razón. Señor Moreau, Mel ha estado trabajando demasiado para atender los problemas de la compañía recientemente, lo que la ha hecho enfermar por agotamiento