Cuando Joshua llegó a la Villa Bahía Azul, Luna estaba acompañando a Christian hacia la salida.

Los dos reían y charlaban mientras salían de la villa.

Joshua aparcó en un rincón oscuro y bajó la ventanilla. Él podía oír sus voces en la brisa nocturna.

Luna llevaba ropa recién comprada y caminaba por delante. Ella sonrió y caminó junto a Christian.

"Siento mucho lo de hoy. Quería dejarte probar mi cocina, pero el accidente en el mercado...".

Luna entonces miró a Christian con una sonrisa. "Pero está bien. Mañana no pasará nada. ¿Por qué no vienes mañana y la pruebas?".

Christian se rio. "De acuerdo. Eso también es genial. Hoy no traje los documentos. Los traeré mañana para ti".

Tras decir esto, Christian se volteó para mirar a Luna. "Bien, por cierto, ¿qué les gusta a Nigel y Nellie? No puedo venir con las manos vacías mañana".

Luna no pudo evitar reírse. "No hace falta que traigas regalos para ellos. Visitarlos es el mejor regalo que podrías darles".

Christian ya había planead