Joshua se recostó débilmente en el asiento trasero. Su voz era tan débil que era casi inaudible.
Él se mordió los labios, suspiró con fuerza y dijo: "Llama a la Doctora Rowena Shaw. Pídele que envíe dos de los mejores médicos traumatólogos y un ortopedista a la casa. Dirígete a casa".
Jude frunció el ceño mientras conducía. “Joshua, creo que igual deberías ir al hospital. Tu herida es tan grave que pedirle a un doctor que fuera a tu casa podría…”.
"Vamos a casa".
Joshua cerró los ojos y se recostó contra el asiento de cuero. Su voz era baja. "Neil fue torturado por Aura. Él ya está en la Villa Bahía Azul. Quiero ir a casa. No quiero ir al hospital. Si no veo a Neil, me preocuparé…”.
Luna, quien estaba presionado la herida, se quedó atónita al escuchar las palabras de Joshua. Ella levantó la cabeza y miró a Joshua conmocionada. Su voz sonaba ronca. "¿Tú... te preocupas tanto por Neil?".
En ningún momento Luna sintió el amor de Joshua hacia los niños. Solo recientemente, cuando Nig