79. De vuelta a Eraniel
—¡Karim! —gritó Marcus, intentando detenerlo.
Mariel abrió los ojos con terror. Apenas podía respirar. En la mirada de Karim ya no quedaba amor, ni compasión… solo destrucción.
Karim arrojó a Mariel al suelo y salió del calabozo, arrastrando a Marcus con él. Al llegar a la entrada, se dirigió con frialdad al guardia:
—Cierra las rejas. No saldrá de aquí… no hasta que su producto esté listo para morir igual que ella.
El dolor que Mariel sintió en ese momento no se comparaba con nada que hubiese vivido antes. Ya no solo le dolía el cuerpo, ni las heridas abiertas en su carne. Le dolía el corazón, las entrañas… porque ahora no era solo una esclava, una niña secuestrada, una mujer maltratada o violada. Ahora era una madre. Y todo su ser existía para proteger la vida que crecía dentro de ella.
Karim regresó al castillo sumido en el tormento. Sabía, en lo más profundo, que ese niño era suyo. Pero no podía amarlo. No con el odio que sentía por Mariel. Su rabia era más grande que cualquier otr