Todos habían quedado boquiabiertos con la noticia en el banquete, Margareth y Néstor se acercaron para romper el hielo a Annette y a Tristán y los abrazaron.
- ¿A tu novio le encanta llamar la atención, verdad? – preguntó burlona Margareth cuando abrazó a Annette.
- Quedamos en que lo contaríamos después de la firma del contrato y así fue, solo eso – respondió Annette aliviada.
- Pues lo importante es que ustedes sean felices, lo demás no interesa – comentó Margareth sonriente.
- Estamos felices, Margareth – respondió Tristán abrazando a Annette.
- ¡Sí, muy felices! – Exclamó Annette sonriente abrazando a Tristán, se la notaba más aliviada ahora que ya lo habían contado, ese secreto la desesperaba.
- Quien creería que tú te ibas a enamorar – comentó Néstor con tono burlón mientras le daba palmaditas en su espalda – no eres material del que se enamora y menos de una chica como Annette, buena, tierna e inocente, todo lo contrario lo eres tu.
- Eso puede cambiar cuando encuentras el amor