46. Alguien, llame al 911
Amber fue a visitar a Brigitte, su fin principal era saber cómo seguía en su recuperación, aunque albergaba el fuerte deseo de poder ver nuevamente a Liam antes de terminar el día.
Le presentaron a Gregor y luego saludó al resto de los presentes, su amiga al notar que con su mirada buscaba en otros lugares de la casa sonrió y comentó, —Tu enamorado está en la terraza.
— No sé de qué hablas, nosotros somos…
— No me mientas, que te conozco, ¿Te gusta?, ¿verdad?, es inevitable no notar que entre ustedes hay un fuego a punto de arder, pero no tienes que hablar de eso ahora, solo quiero que sepas que Elizabeth y yo lo aprobamos.
— Debes dejar de ver novelas, tienes una imaginación muy basta.
— ¿Y ya se besaron?, se nota un coqueteo y emoción bonita.
— ¿Brigitte?
— Está bien, no diré nada más, excepto que está en la terraza, no quiso comer, ni conversar, por lo que supongo que tuvo un día difícil.
— ¿Por qué lo dices?
— Porque se aisló en cuanto llegó y en todos estos días no se ha comporta