Cansandome por venganza
Cansandome por venganza
Por: Luna
Capítulo 01

Tome una copa de champang y comience a caminar un poco tratando de alejarme de todos estos desconocidos, decido ir al despacho de mi padre sabiendo que ahi nadie entrara.

Odio estas estúpidas fiestas ¿Cuál es el punto de celebrar mi cumpleaños con personas que no conozco? O personas que no me agradan definitivamente, no debi hacerle caso a mis padres pero como siempre termino obedeciendo.

Apenas empujo la puerta del despacho y lo que mis ojos ven hace que casi me caiga.

simplemente no podía creer lo que mis ojos estaba viendo, ahí frente a mí estaba alejandro la persona con la que llevo poco más de cinco años de relación, está de espaldas desnudo frente a el estaba nada más y nada menos que a Leandra ¡¡Mi m*****a hermana!!

Ella tiene sus brazos sobre su cuello mientras abre más las piernas, está sobre el escritorio no puedo evitar sentirme asqueada ante la vista frente a mí.

Mi hermana fija sus ojos en mi mientras que alejandro sigue en lo suyo, el no se detiene hasta que ella le empuja el pecho con las manos, entonces me observa y palidece. 

La mano que tengo sobre la perilla me tiembla, un nudo se forma en mi garganta y el aire se comprime en mis pulmones. 

-¿Cómo es posible esto? -me tiembla la voz y suena bastante debil- ¡¿Cómo fueron capaces de hacerme esto?! ¡¡Es mi m*****a hermana alejandro!!- Aquello sale un poco más fuerte la rabia mezclada con la decepcion hace que pierda el control.

Veo como el se viste de forma apresurada mientras que ella lo hace lentamente puedo ver una leve sonrisa en su rostro.

¡¡Maldita zorra!!

Lo está disfrutando, lo sé.

-No comiences ¿quieres? -blanquea los ojos al mirar las lagrimas caer de mis ojos- No es el momento, pero me alegra que ya sepas la verdad, por cierto hermana feliz cumpleaños.

-Alaya.. -susurra alejandro mientras trata de acercarse a mí. 

Me alejo rápidamente de él, no quiero que me toque.

-¡No!-le exclama mi hermana y él se detiene-.¡¿Acaso no está más que claro lo que sucede?! ¡He esperado por tanto tiempo esto, así que ya no pienso seguir fingiendo y ocultando lo nuestro! Merezco dejar de ser la amante.

-leandra por favor - Le susurra a ella para que de detenga.

- No! -ella se acerca a él y tira de su brazo- ¿quieres una explicación? ¡Bien! llevamos saliendo seis meses, lo hacemos cada que no te encuentra- me dice con satisfacción- me ha dado incluso el anillo de compromiso y que es conmigo con quien te quieres casar! 

leandra levanta la mano y me muestra un hermoso anillo de diamantes, es el mismo anillo que me gustó, hace dos semanas cuando fuimos al centro comercial, pasamos a una joyería, lo vi y me enamoré de él y se lo dije.

No puedo con esto.

-¿Es verdad? -le pregunto a él

Me siento tan estúpida quiero gritar quiero golpearlos a ambos pero soy tan estúpida que solo no puedo reaccionar.

-¿La amas? -Le preguntó siento una m*****a masoquista

-No quería que esto pasara -dice-. Te quiero, de verdad lo hago, eres importante para mí. 

Retrocedo un paso

-Pero no me amas- Esta vez soy yo quien susurra

-Me enamoré de ella solo pasó y ya, es con ella con quien quiero pasar el resto de mi vida. 

Es todo, sus palabras son como el frío puñal que atraviesa mi pecho.

Unos pasos comienzan a escucharse cada vez mas cerca.

-Ah, por lo que veo, ya te enteraste -dice un tono tan frío, que me congela. 

¡¿Qué m****a?!

Volteo a verla. 

-¿Tú lo sabías? 

-Por supuesto que sí, ¿quién crees que los ha ayudado a salir todo este tiempo? 

-Deja de poner esa cara es tu hermana 

-¡Lo que dices es una locura, él era mi maldito novio! -exclamo- Mi novio y la puta de tu hija se acostaba con el!- Grite 

-¿Quieres bajar la voz? Los invitados podrían darse cuenta de lo que sucede Alaya se más consciente -Dice mi madre mientras me mira molesta.

-¡Me importa una m****a que todos se enteren de que mi hermana es una zorra desgraciada!- Grité nuevamente.

En este punto nadie me importaba.

Debo salir de aquí 

-¡Tal vez seguiría contigo si no fueras tan mojigata! -leandra dice- ¡Qué te cuesta dejar que sea feliz con el hombre que amo! 

Sus ojos se llenan de lágrimas falsas.

- Eres una zorra- Le digo lo más tranquila que puedo 

-¡Lo amo! ¿Acaso no lo puedes ver? Lo has perdido desde hace mucho tiempo, pero como siempre estás enfocada en tu trabajo, no te diste cuenta, lo siento, hermana, pero el es mío. 

Decido que no puedo seguir aquí no puedo seguir con las humillaciones, trato de salir, alejandro toma mi brazo me suelto bruscamente y salgo de aquel despacho dejando mi corazón en el suelo hecho pedazos.

Mientras salgo de casa de mis padres muchas personas se acercan a saludar y yo solo las esquivo no estoy para eso, no quiero fingir una sonrisa no ahora.

Busque mi teléfono en uno de los bolsillo escondidos de mi vestido y le marco a Samantha 

-Ya se que estas aburrida en tu propia fiesta - Dice al atender- Debiste venir conmigo, aun estas a tiempo alaya 

-Dónde estas?- Mi voz sale un poco distorsionada por las inmensas ganas que tengo de llorar

¿Porque debo llorar por eso?

Joder! Me siento tan estúpida tan inútil! ¿Cómo no lo vi venir? 

-Esta todo bien? Estoy en aeropuerto aun no despega el avión 

-Voy para alla- Dicho eso cuelgo

No quiero dar explicaciones por teléfono y menos aquí 

-Se encuentra bien señorita?-Pregunta el valet, no respondo solo tomo las llaves que extiende hacia mi, me subo mi deportivo y es así como me dirijo al aeropuerto, al área reservada que tiene su padre.

Las lágrimas nublan un poco mi vista pero agradezco a quien sea que no hay casi vehículos en la carretera así que llego rápido.

-Joder, has estado llorando demasiado- Dice mariana al verme -¿que diablos ha sucedido?

-Alejandro él y mi hermana... los encontré teniendo sexo lo peor es que me dijeron que se aman y que ya llevan seis meses o un poco más saliendo a mis espaldas, ¿sabes qué es lo peor? Que mi madre lo sabía y los apoyaba, se van a casar! El le dio MI maldito anillo!

-Esos hijos de perra!-Exclama furiosa-te dije que tu hermana andaba tras tu ahora ex novio, no dejes que te arruinen tu cumpleaños. Hoy disfrutaremos si o no 

No se si sea la mejor decisión irme con ella pero ¿que tengo que perder? Nada, no tengo nada.

A la m****a todo.

-Está bien, iré contigo.

La veo sonreir levemente y luego me abraza. 

-¡Vegas, allá vamos! -grita llena de euforia. 

Ojalá pudiera tener un poco de su entusiasmo, ojalá este no se haya convertido en mi peor cumpleaños, y ojalá, paguen cara la traición, solo espero no encontrarme con problemas en las Vegas. 

El sol es abrasador para cuando llegamos, la idea de visitar por la noche el centro, no me hace mucha ilusión, mucho menos cuando sigo teniendo el corazón roto y la rabia burbujeando en mi sistema, ¿acaso nunca se va a quitar esta sensación asesina? Y lo peor es que luego de acomodarnos en la suite del papá de mariam ella se compromete a buscarme algo de ropa para estar en combinación con la situación. 

Por lo que termino vestida como puta de clase de alta, con un vestido negro demasiado entallado para mi gusto.

Aunque tengo que admitir que el resultado me agrada, pasamos por un par de bar de los que terminamos saliendo a los cinco minutos, hasta que damos con un club nocturno nuevo. Bailamos un poco, bebemos, ese es el punto, que el dolor hace que pierda la cuenta de los cócteles que bebo hasta que termino mareada. 

-¡Lo odio! -chillo-¡Lo odio tanto, es decir, le entregué mis mejores años! Me quédate sola para siempre los hombres son una escoria y rebeca también lo es esa zorra 

-Los hombres son así, amiga, traicioneros, no podemos confiar en ellos -ríe-. Una mujer como tú, es mucho para alguien como el simplemente nunca pudo manejarte. 

-Sabes qué, eso es, voy a encontrar a un hombre mucho mejor que él, y le daré la lección de su vida -bufo al tiempo que vuelvo a beber mi tequila. 

Ambas continuamos destilando nuestro veneno contra Alejandro y mi familia, hasta que nos dirigimos a la pista de baile, todo me da vueltas, pero eso no me importa, 

Llega un momento en el que al girar, choco contra alguien que me sostiene de las caderas. 

-Lo siento -susurro con torpeza seguido de soltar una risa. 

Levanto mi mirada y aunque no es buena en estos momentos, ya que desenfoco todo, noto que un par de ojos grises, inyectados en sangre, me miran como si quisiera follarme aquí mismo. La música sigue a nuestro alrededor, su aliento a Vodka me marea más y sin saber bien lo que estoy haciendo o en las consecuencias, sucede, lo beso. 

El tipo no pierde tiempo, me estrecha contra su cuerpo, su calor se filtra por mi piel y es como me fundo en el refugio de un tipo al que no conozco. 

¿Qué es lo peor que puede pasar? 

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