La joven tenía la cara bastante concentrada leyendo cada uno de las cláusulas del contrato, tenía que encontrar alguna falla, pero no había ninguna.
¿Qué diablos significa tener un hijo? — dijo ella, eso quería decir que tendría que embarazarse casi de inmediato —¿estás loco? — ella tenía la cara crispada entre sorpresa y enojo, no sabía cuál podía ganar, en verdad ese contrato era una completa locura.