~ BIANCA ~
Lancé el celular contra la pared opuesta con toda la fuerza que logré reunir. Golpeó con un sonido satisfactorio de crack y cayó en el piso, la pantalla probablemente destrozada.
Óptimo. Una cosa más rota.
Así como mi memoria. Mi sanidad. Mi vida entera, aparentemente.
Me senté en el borde de la cama, respirando pesadamente, sintiendo las lágrimas de frustración quemar detrás de mis ojos. No iba a llorar. No iba.
Pero caray, era tan frustrante luchar contra la propia memoria para descubrir cosas básicas sobre mí misma. Cosas que cualquier persona debería saber. Cosas simples.
¿Quién soy yo?
La pregunta resonaba en mi cabeza sin respuesta.
Me levanté y fui hasta la maleta. La abrí con fuerza y comencé a hurgar el contenido, lanzando ropas a los lados sin ceremonia.
Necesitaba algo. Cualquier cosa que me diera una pista sobre quién realmente era.
Ropas. Muchas ropas. Todas caras demás. Cashmere, seda, lino italiano. Zapatos que costaban más de lo que la mayoría de las persona